Sin duda alguna una vez mas queda demostrado que en el mundo los buenos somos más, esta es la historia de la señora María, una anciana que fue adoptada por la enfermera luego de que su familia la abandonara por tener cáncer.
En el planeta existen muchos sucesos, historias, momentos, donde lo negativo tiene un papel, pero dejando de lado eso, hay historias que demuestran a través de las acciones, que en los seres humanos los positivo le gana la batalla a lo negativo, y que por lo tanto hay actos que sí merecen ser tener un reconocimiento.
Es el caso de una mujer llamada Verónica Grossi, enfermera de cáncer desde hace años de un hospital en carangola Brasil, una mujer que pensaba mucho en el prójimo, pero en especial sobre una problemática de los habitantes con la clínica de salud del pueblo, lugar que quedaba lejos para algunas personas, lo que la impulsó a tomar su motocicleta para visitar los barrios aledaños y mirar quien necesitaba de su ayuda.
Fue en estás visitas, cuando conoció a María Martins de 58 años, una anciana que vivía con su hija y yerno, carismática y muy comunicativa, que en ese momento no se encontraba muy enferma, pero vivía de forma muy precaria.
Al pasar los años y el cáncer María y Verónica crearon un vínculo especial
Doña Maria, fue un vez a casa de Verónica para visitarla. Ésta se percató de que algo sucedía, y se enteró que María sufría de agresiones por su hija y yerno donde frecuentemente se drogaban y aprovechaban para agredir a la anciana. Doña María no le contó nada a Verónica, ella se dio cuenta por sus emociones.
«Un día fui a visitarla, encontré su casa abierta, en silencio, miré y la encontré desmayada tendida en la cama, pensé que había fallecido, asustada, agarré el carro de mi papá, la llevamos en el auto al hospital, estaba muy deshidratada y la llevé y fue dejada unos días en el hospital», manifestó Verónica.
La hija de Doña María fue alertada de la situación por Verónica, pero aun así en el estado de salud complicado de su madre, le dio lo mismo y no asistió al hospital.
En Doña María fue detectado un tumor en la región torácica entre el pulmón y corazón, fue allí cuando la enfermera (Verónica) le informó a Doña María sobre lo que pasaba con su hija.
La hija
Verónica habló con la anciana, diciéndole que su hija, no iba más a visitarla, pero le dijo que contaba con su apoyo para cuidarla lo que más pudiese, fue aquí cuando la mujer adoptó a la anciana dos meses después.
El tratamiento para el cáncer de Doña María, es costoso, por lo que Verónica implementó una campaña junto a su hijo de 14 años, para recaudar recursos y brindarle los mejores tratamientos para que María pueda vivir muchos años y así controlar su enfermedad.
Doña María fue hospitalizada al parecer por metástasis es decir por la posible expansión de su tumor a otras partes de su cuerpo, sin embargo, a pesar de estas batallas, doña María es atendida a través de los cuidados de Veronica, que ya cumplen seis meses de vivir juntas, brindándole sincero afecto y amor.
Historias que demuestran que la bondad en humanos, sí existe, y que cada vez los buenos somos más.
Por: DanielVides Pérez.
